Uniones de Hecho

Aparte convencionalismos y creencias religiosas casarse o no casarse es hoy por hoy una mera opción, cada día es más habitual que las parejas no formalicen su relación a través del matrimonio. Unas se inscriben como parejas de hecho en los registros autonómicos y otras simplemente hacen una vida en común.

Todas las posibilidades son legales, válidas y respetables sin embargo no confieren los mismos derechos. Estar casado ofrece más derechos que ser pareja de hecho registrada y esto que simplemente ser pareja.

Las relaciones “more uxorio” no están reguladas por el legislador pero sí es posible y aconsejable que los miembros de la pareja las regulen con acuerdos entre ellos, en especial en lo que afecta a su esfera económica. Esto acuerdos, verdaderos contratos, se deben recoger en una escritura notarial y resultan de suma importancia en lo patrimonial cuando la relación entra en conflicto.

Como decíamos en estas relaciones no reguladas existen también crisis y, a menudo además de existir un patrimonio común también hay también hijos, se deben establecer custodias, pensiones, domicilio familiar, etc. Aquí sí hay regulación, y dará exactamente igual si hay matrimonio o no, la diferencia será que no habrá de solicitarse el divorcio a los Tribunales, en el resto se actuará ante ellos igual pues las relaciones paterno filiales son ajenas al vínculo matrimonial.

No olvides nunca que los derechos y obligaciones de los padres para con los hijos y de los hijos para con los padres –que también ellos tienen obligaciones contigo- no nacen del matrimonio, sino del propio hecho de ser hijo y de ser padre, de ese parentesco. Sabemos que hay padres que piensan que los juzgados no los tratarán igual porque el hijo hubiese nacido, por ejemplo, de una relación fugaz, y queremos dejar claro que eso es totalmente falso, tienen exactamente los mismos derechos.